SEMANA DE PASIÓN

                                       

Como hombres y mujeres de Fe no podemos dejar pasar estos días que nos ayudaran mejor a penetrar en las grandes verdades de la vida terrena de Jesús. Estemos donde estemos y vayamos a donde vayamos si tenemos el ánimo bien dispuesto buscaremos acercarnos a la iglesia o templo y contemplar con entrega esos aconteceres de Pasión, Muerte y Resurrección de Jesucristo, en los Oficios del Triduo Pascual. Pues el mensaje implícito que llevan es de una dimensión tan grande que, sin duda, nos supera. Si tenemos el ánimo bien dispuesto se nos abrirán nuevas enseñanzas y novedosos hallazgos para nuestra vida de cristianos, con el gran misterio de la Redención que se consuma paso a paso en estos días y que va desde la entrada triunfal en Jerusalén, la institución de la Eucaristía el Jueves Santo, los terribles aconteceres del Viernes Santo, con la muerte durísima y solitaria de nuestro buen amigo el Señor Jesús. Y todo ello termina con la Resurrección con la alegría del triunfo de Jesús sobre la muerte que es, sin duda, nuestro «mejor patrimonio» como cristianos. Saber que resucitaremos y que, de hecho, como dice San Pablo, sepultados en Cristo mediante el bautismo resucitamos con Él.

Asimismo podemos participar de todas las manifestaciones colectivas -procesiones, vía crucis, hora Santa, etc. 

 

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