26 de marzo MARTES SANTO

DSCN0623Jesús vuelve a Jerusalén.

Pasan por el lugar de la higuera maldecida. Al ver el templo, profetiza que será destruido. Los discípulos están tristes porque Jesús les anuncia que uno de ellos lo va a entregar, que dentro de dos días le matarán y le dice a Pedro que lo negará tres veces antes de que cante el gallo.
Los cristianos, como Él, hemos aprendido a cumplir siempre la voluntad de Dios Padre, por encima de todo. Por ejemplo, Juana de Arco, cuando estaba al frente de sus soldados franceses, en una gran batalla contra Inglaterra, Dios le anuncia que ese día será herida. Entonces una amiga suya le dice que no vaya a pelear. Y Juana le contesta en tono irónico: «sal tú y di a mis generales que Juana de Arco no luchará porque tiene miedo a ser herida». Y salió valerosamente al frente de sus soldados, y fue gravemente herida. No tengamos miedo de aceptar la voluntad de Dios.

Oración

Cristo Jesús, yo soy ese Judas que te he traicionado tantas veces. Pero no quiero, como hizo Judas, desconfiar de tu misericordia y de tu perdón. Como Pedro, quiero dar mi vida por ti, aunque soy débil: lloraré mis pecados, iré al encuentro de tu mirada de amigo siempre fiel y seguiré tus pasos con humilde fe. (Continúa con tu oración personal)

MUNDO: ¡Cuántos Judas entregan hoy al maestro, retiran los crucifijos y persiguen al cristianismo! Ojalá no tengan el triste final de Judas.
FE: Aunque alguna vez neguemos a Cristo, siempre contamos con su mirada, su perdón y su amor.

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