II DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO – Ciclo B – 14 Enero

«VENID Y VERÉIS »

SANTO EVANGELIO según SAN JUAN 1, 35 – 42

En aquel tiempo, estaba Juan con dos de sus discípulos y, fijándose en Jesús que pasaba, dice:

«Este es el Cordero de Dios». Los dos discípulos oyeron sus palabras y siguieron a Jesús.

Jesús se volvió y, al ver que lo seguían, les pregunta:

«¿Qué buscáis?». Ellos le contestaron: «Rabí (que significa  Maestro), ¿dónde vives?».

Él les dijo: «Venid y veréis» Entonces fueron, vieron dónde vivía y se quedaron con él aquel día; era como la hora décima. Andrés, hermano de Simón Pedro, era uno de los dos que oyeron a Juan y siguieron a Jesús; encuentra primero a su hermano Simón y le dice:

«Hemos encontrado al Mesías  (que significa Cristo)».

Y lo llevó a Jesús. Jesús se  le quedó mirando y le dijo:

«Tú eres Simón, el hijo de  Juan; tú te llamarás Cefas (que se traduce Pedro)».

Palabra del Señor

“¿A QUIÉN BUSCÁIS?”

Tres veces hizo Jesús la misma pregunta: “¿A quién buscáis?”. Hoy, a sus primeros discípulos. La última noche de su vida mortal a los que le detuvieron en Getsemaní. Y a María Magdalena, la mañana de Pascua. Cuando Jesús hace esa pregunta es porque nos ve hambrientos de felicidad, de sentido, de orientación, de armonía interior. Es para decirnos que la iniciativa parte siempre de Él y que espera una respuesta libre, consciente, amorosa y sincera. Jesús la hace cuando y donde Él quiere: en nuestro trabajo, en la facultad, en el noviazgo, en el seminario, en el sacerdocio, en medio de la tormenta de una crisis o de la calma, en un momento de oración o de retiro, en la niñez, en la adolescencia, en la juventud o en la edad madura o en la vejez. Con esperanza, con sumo respeto, sin atosigar a nadie, sin obligar a nadie. Es el momento de preguntarnos: ¿hemos escuchado también nosotros esta pregunta en momentos de oración, de silencio contemplativo, de desierto del alma, de fracasos aparentes, de éxitos, de enfermedad…? Pensemos: ¿Sigo a Cristo por Él mismo o por ventajas temporales? ¿Qué espero de Jesús: felicidad terrena o vida eterna? ¿Mi vida como seguidor de Cristo es coherente, alegre, por eso atraigo a otros para Cristo?

Citas para reflexionar:

  • «Cuanto más enraizados estamos en Cristo, más serenidad interior encontramos, incluso en medio de las contradicciones cotidianas». Papa Francisco
  • «Cuando un niño destroza un juguete parece que le está buscando el alma« Víctor Hugo
  • «Los pecados contra el primer mandamiento son los que más agradan al diablo»  P. Pedro P. Alexandre  

Noticias de la Iglesia:

  • Este domingo, 14 se celebra la Jornada Mundial del Emigrante y del Refugiado, este año con el lema “Acoger, proteger, promover e integrar a los emigrantes y refugiados”.
  • Más de 2.000 personas viviendo en las “periferias” disfrutaron de un especial “Circo de Solidaridad” el pasado jueves 11 de enero, gracias al Papa Francisco.
  • El Papa Francisco irá a Chile y a Perú como “Peregrino de la Alegría del Evangelio”.
  • Varias diócesis de Francia han comenzado un camino de encuentro poniendo en práctica de Amoris laetitia.
  • El Patriarca Kiril de Moscú en su mensaje navideño dijo: «Los valores de la familia resisten a pesar de los increíbles esfuerzos para destruirlos».
  • Donad Trump es “Personalidad Pro-vida del año”.
  •  Un millón doscientas mil personas participaron en la Marcha de los Reyes Magos, celebrada en Polonia.
  • El Ayuntamiento de Castellón rectifica en parte tras señalizar iglesias cristianas con medias lunas.
  • Los obispos españoles critican al gobierno por no cumplir los cupos de refugiados. La Iglesia propone un gran pacto por la hospitalidad, en vista a la “Jornada Mundial del Emigrante y del Refugiado”.
  • El pasado domingo se clausuró el Año Jubilar de Caravaca de la Cruz, pero continúan la indulgencia y las peregrinaciones.
  • –La Diócesis de León se suma a la Jornada Mundial del Emigrante y del Refugiado con una llamada a la acción para «acoger, proteger, promover e integrar».

LOS FRUTOS DE LA SAGRADA COMUNIÓN BIEN RECIBIDA

1-La Eucaristía nos une íntimamente con Cristo y, en cierto sentido, nos transforma en Él.

2-La Eucaristía nos une con la Santísima Trinidad.

3-La Eucaristía aumenta la gracia santificante al darnos la gracia sacramental que alimenta, conforta y vigoriza nuestra vida sobrenatural.

4-La Eucaristía aumenta la fe, la esperanza y, sobre todo, la caridad. Las virtudes infusas, los dones del Espíritu Santo y la eficacia santificadora.

5-Borra los pecados veniales y preserva de los pecados futuros. Perdona la pena temporal debida a los pecados y es prenda de la gloria futura.

ORACIÓN: TE HE BUSCADO SEÑOR

TE HE BUSCADO SEÑOR

Y te he encontrado en el amor

Y te he visto en el hermano

Y te he tocado en el triste.

TE HE BUSCADO SEÑOR

Y en la oración he hablado contigo

Y en la paz te he abrazado

Y en el perdón te he descubierto.

Y en la alegría te he visto sonreír

TE HE BUSCADO SEÑOR

Y en la fraternidad me has visitado

Y en la Palabra te he escuchado.

Y, después de buscarte, Señor

es cuando me he dado cuenta

de que por fin te he encontrado.

GRACIAS POR DEJAR BUSCARTE SEÑOR

 “EL REGALO NAVIDEÑO”

Erase dos niños muy amigos. Se ayudaban y se lo pasaban la mar de bien jugando con sus compañeros. A uno de ellos le encantaba tocar la armónica. Siempre la tenía en la boca deleitándose con sus melodías favoritas. El otro  amigo era muy aficionado al patinaje. Se pasaba muchas tardes patinando de un lugar a otro, dando saltos y haciendo piruetas. Las veces que los dos coincidían con sus patines y su armónica creaban auténticos espectáculos en la calle. La gente se paraba admirada y los aplaudía. Llegaron las  fiestas de Navidad. Los  dos amigos tenían la costumbre de hacerse un regalo por estas fechas. El de los patines tuvo la idea de regalar una armónica nueva a su amigo. Rompió su hucha, pero se dio cuenta enseguida que no disponía de dinero suficiente para comprarle la mejor. Sin pensarlo dos veces vendió sus patines. Con el dinero que consiguió y el de la hucha pudo comprar la mejor armónica de la tienda. Cuando llegó el día de los Reyes se encontraron los dos amigos para intercambiar los regalos. Al abrirlos se llevaron una gran sorpresa. Los dos habían hecho lo mismo: vender lo que más les gustaba para poder comprar el mejor regalo para su amigo. El regalo que recibió el que había vendido sus patines, fue el de unos patines nuevos. Y el regalo que recibió el que había vendido su armónica fue una armónica nueva. Los dos estallaron en una sonrisa empapada de emotivas lágrimas. Los dos, renunciando a lo que más les gustaba, habían salido ganando.

REFLEXIÓN: Me vienen cuatro niños a pedirme caramelos. Sólo me quedan tres y ellos son cuatro. Se los doy  al mayor, y éste los distribuye a los más pequeños. Él se queda sin caramelo. Entonces me acuerdo que me queda un «chupa-chups» en un cajón y se lo doy. El más pequeño levanta la voz: «¡Qué morro!» Sin pensárselo dos veces, el niño le da el «chupa-chups» y le coge el pequeño caramelo.

Esta escena, aparentemente intrascendente, me ha impactado. En el clima de desencanto que vive hoy gran parte de la humanidad, encontrarte con chispas motivadoras de esperanza como ésta rehace el estado de ánimo del más escéptico. Si ponemos los ojos en los poderosos «Herodes» de este mundo y nos arrodillamos ante ellos para salir del pozo estamos perdiendo el tiempo. Una vez más hay que reafirmarnos «ingenuamente» que el camino de salida personal, familiar y social es de agacharnos hacia los más pequeños e indefensos para extraer lecciones de vida. Es verdad que son pequeñas chispas luminosas pero que son capaces de crear un mundo fraterno. «El arroyo de Dios desborda de agua preparando los sembrados» (salmo 64).

Esta escena, unos días después de Reyes, se debe reproducir en muchas familias que han perdido una oportunidad educativa. Un juguete, por más costoso que sea, nunca podrá llenar el vacío de una presencia paterna-materna gratuita. Quedas alucinado cuando ves a un pequeño «exigiendo» al abuelo, no un regalo, sino dinero. «¿Pasaría esto, por ejemplo, si hubiéramos ayudado a los niños a escribir la carta a los Reyes Magos pidiendo también para el papá, la mamá, la abuela, el abuelo…?» Ya de mayor, aquel niño «especial» nacido en Belén, sentenció: «Hace más feliz dar que recibir». El niño de «la armónica», el de los «patines» y el del «chupa-chups» nos lo confirman. ¿Los grandes nos lo hemos acabado de creer?

José Perich y A. Bautista

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