III DOMINGO DE CUARESMA -CICLO A- 19 de Marzo

“ÉL ES DE VERDAD EL SALVADOR DEL MUNDO”

(Juan 4, 5-15. 19-26, 39a. 40-42)

En aquel tiempo, llegó Jesús a un ciudad de Samaria llamado Sicar, cerca del campo que dio Jacob a su hijo José; allí estaba el pozo de Jacob. Jesús, cansado del camino, estaba allí sentado junto al pozo. Era hacia la hora sexta.

Llega una mujer de Samaria a sacar agua, y Jesús le dice: Dame de beber».

Sus discípulos se habían ido al pueblo a comprar comida.

La samaritana le dice: «¿Cómo tú, siendo judío, me pides de beber a mí, que soy samaritana?» (porque los judíos no se tratan con los samaritanos).

Jesús le contestó: «Si conocieras el don de Dios y quién es el que te dice “dame de beber”, le pedirías tú, y él te daría agua viva».

La mujer le dice: «Señor, si no tienes cubo, y el pozo es hondo, ¿de dónde sacas el agua viva?; ¿eres tú más que nuestro padre Jacob, que nos dio este pozo, y de él bebieron él y sus hijos y sus ganados?».

Jesús le contestó: «El que bebe de esta agua vuelve a tener sed; pero el que beba del agua que yo le daré nunca más tendrá sed: el agua que yo le daré se convertirá dentro de él en un surtidor de agua que salta hasta la vida eterna».

La mujer le dice: «Señor, dame esa agua: así no tendré más sed, ni tendré que venir aquí a sacarla. Veo que tú eres un profeta. Nuestros padres dieron culto en este monte, y vosotros decís que el sitio donde se debe dar culto está en Jerusalén»

Jesús le dice: «Créeme, mujer: se acerca la hora en que ni en este monte ni en Jerusalén adoraréis al Padre. Vosotros adoráis a uno que no conocéis; nosotros adoramos a uno que conocemos, porque la salvación viene de los judíos. Pero se acerca la hora, ya está aquí, en que los verdaderos adoradores adorarán al Padre en espíritu y verdad, porque el Padre desea que lo adoren así. Dios es espíritu, y los que lo adoran deben hacerlo en espíritu y verdad.»

La mujer le dice: «Sé que va a venir el Mesías, el Cristo; cuando venga, él nos lo dirá todo».

Jesús le dice: «Soy yo, el que habla contigo.»

En aquel pueblo muchos creyeron en él. Así, cuando llegaron a verlo los samaritanos, le rogaban que se quedara con ellos. Y se quedó allí dos días. Todavía creyeron muchos más por su predicación, y decían a la mujer:

«Ya no creemos por lo que tú dices; nosotros mismos lo hemos oído y sabemos que él es de verdad el Salvador del mundo».

Palabra del Señor.

“EL POZO DE…”

Todos tenemos un pozo donde beber y poder encontrarnos con el Señor.

*El pozo de la oración. En él, el Señor, nos moldea y nos habla. Es un pozo en el que, el corazón que busca a Dios, se abre de tal manera, que el Espíritu obra maravillas en él.

*El pozo de la Eucaristía. Cuando nos acercamos a ella sentimos que, además de mitigar la sed, el Señor nos alimenta y fortalece para batallar en la vida.

*El pozo de la Palabra. Al acercarnos al pozo de la Palabra sentimos que el Señor nos interpela con la misma fuerza que a la Samaritana. Parece como si, ésta o aquella Palabra, estuviera expresamente indicada, dicha y diseñada para cada uno de nosotros. Como si Dios, al igual que lo obró en la misma Samaritana, tuviera especial interés en despertar nuestra sed por Él y para El.

*El pozo de la Iglesia. En él nos sentamos para escuchar la Palabra; para ponernos en paz con Dios por el sacramento de la reconciliación; para recibir el pan de la Eucaristía o para compartir, lo mucho o lo poco que tenemos, con los más necesitados.

Profundicemos bajo las aguas del simple pozo de nuestra existencia y…busquemos ese Espíritu que nos puede dar vida y tonificar totalmente, de arriba abajo, lo que somos, pensamos y realizamos.

Citas para reflexionar:

  • «Oremos los unos por los otros para que sepamos abrir nuestras puertas al débil y al pobre» Papa Francisco
  • «Cuanto menos poseemos, más podemos dar. Parece imposible, pero no lo es. Esa es la lógica del amor» Santa Teresa de Calcuta
  • «La sangre de los mártires, que se une a la sangre derramada del Señor, es fuente de vida para la Iglesia » Delegado de la Causa de los Santos-  Madrid

Efemérides y noticias:

  • El  13 de marzo se cumplió 4 años de la elección del cardenal argentino, Jorge Bergoglio, como papa, que adoptó el humilde nombre de Francisco. Inicia el quinto de su pontificado que servirá para seguir con las reformas, que sin duda, cambiarán y humanizarán a la Iglesia de Cristo en su actual etapa.
  • El Papa Francisco está abierto a algún tipo de ordenación para hombres casados los “viri probati”. Más aclara que si faltan vocaciones es porque falta la oración, sin olvidar la baja natalidad, un trabajo deficiente con los jóvenes y tampoco se pueden abrir los seminarios a quienes no tengan una vocación verdadera, porque después «el pueblo sufrirá».
  • La Iglesia en Irak no quiere que los cristianos formen sus propias milicias y sí que promuevan el bien común de todos.
  • El cardenal Ricardo Blázquez ha sido elegido por los obispos para llevar las riendas de la Iglesia en nuestro país, como presidente de la Conferencia Episcopal. El cardenal Cañizares será vicepresidente.
  • El cardenal Blázquez denuncia la ignorancia de Podemos sobre lo que es la Misa, es un recurso político poco serio. Podemos sigue insistiendo en retirar la Misa de TVE y además quiere acabar con los capellanes en el ejército.
  • El sábado 18 el cardenal Osoro ha abierto la causa de canonización de 49 sacerdotes y 7 familiares mártires en Madrid de la persecución religiosa del S. XX. Hay aún una lista en estudio de 400 sacerdotes.
  • El padre Ángel de Mensajeros de la Paz cumplió el día 11, 80 años. Su labor comenzó en la cuenca minera asturiana. Mensajeros está presente en 50 países, con más de 5.000 voluntarios y 4.000 empleados. Su “Teléfono Dorado” 900 22 22 23 tiene más de 5.000 llamadas al año, sin coste del usuario.

ORACIÓN: ¡TÚ, SEÑOR, ERES EL POZO DE AGUA VIVA!

¿Cómo me darás de esa agua  viva? ¿Cómo la sacarás, Señor?

¿Dónde tienes un cántaro? ¡Ah! ¡Ya lo sé, Señor!

Yo soy el vaso y el cántaro con los cuales sacarás,

para  mí y para los demás, el agua viva

que brota a  chorros de la fuente de tu costado.

Entra, Señor, en el pozo de  mi alma:

es hondo, como el de la  Samaritana

con fragilidades, como la vida  de la Samaritana

con sed de agua limpia, como  la de la Samaritana

con sed de Dios, como la de  la Samaritana

Entra, Señor, en el pozo de  mi alma

Y que, como la Samaritana,  pueda decir también

He estado con Jesús…y sabe  todo lo que he hecho.         Amén.

“FESTIVIDAD DE SAN JOSÉ”

San José, a tono con la Santa Cuaresma, nos transmite sobriedad y profundidad, sencillez y silencio, oración y austeridad.

San José, con el pensamiento en nuestro seminario, nos recuerda que todos estamos llamados a ser promotores de las vocaciones sacerdotales en nuestro hogar. ¿Cómo es posible que, en nuestra mesa, se hable de las grandes figuras del deporte o de la música y, en cambio, silenciemos la vocación sacerdotal?

El Papa Francisco a los pocos días de su pontificado quiso que, en la plegaria eucarística, junto al nombre de María, San José tuviera su propio espacio. Entre otras cosas porque, San José, representa perfectamente la imagen de la Iglesia contrastada con el Evangelio: humilde, servicial, cercana, comprometida, sin ruido pero sin pausa.

Al festejar a San José, y junto con Él su silencio, llegamos a la conclusión de que su disponibilidad y obediencia o la ausencia de sus palabras en el Evangelio es, todo ello, un gran tesoro para nuestra Iglesia.

-Nos enseña San José a ser grandes desde la pequeñez (como María).

-Nos invita San José a confiar en el Creador aunque aparentemente las cosas nos vayan en contra.

-Nos induce San José a ponernos en camino apoyados en el cayado de la esperanza.

Sólo desde el silencio, con el silencio y en el silencio podremos llegar a comprender, vivir y sentir la presencia del Señor tal y cómo José la abrigó en propias carnes. Su silencio, el silencio de San José, es para nosotros una joya, un modelo, una respuesta a nuestra fe. ¿Confías en Dios? ¡Guarda silencio! ¡Calla! ¡Olvídate de ti mismo y piensa más en los demás! ¿Quieres, como San José, conocer y amar más a Dios? ¡Abre un poco menos los labios y abre un poco más los oídos!

Que el silencio de San José, en este tiempo de la Santa Cuaresma, hable a lo más hondo de nuestras conciencias. Que al festejar su Patronazgo pongamos en sus manos los destinos de nuestra Iglesia, el amor y la oración por nuestros padres y por tantas instituciones que confían en su intercesión.

 

INVOCACIÓN A SAN JOSÉ (San Juan XXIII)

¡San José guardián de Jesús y casto esposo de María, tú empleaste toda tu vida en el perfecto cumplimiento de tu deber. Tú mantuviste a la Sagrada familia de Nazaret con el trabajo de tus manos. Protege bondadosamente a los que se vuelven confiados a ti. Tú conoces sus aspiraciones y sus esperanzas. Ellos se dirigen a ti porque saben que tú los comprendes y proteges. Tú también supiste de pruebas, cansancio y trabajo. Pero, aun dentro de las preocupaciones materiales de la vida, tu alma estaba llena de profunda paz y cantó llena de verdadera alegría debido al íntimo trato que gozaste con el Hijo de Dios que te fue confiado a ti a la vez que a María, su tierna Madre!   Amén

 

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