CARTA A “MARÍA DEL ADVIENTO”, PIDIENDO ALEGRÍA PARA TODOS
Señora:
Quiero que intercedas por todos nosotros para que nos traigas alegría para estos días de Adviento, para los de Navidad y para siempre.
Señora, este año, no quiero pedirte más que «Alegría», que buena falta nos hace.
- Alegría porque la mayoría de tus hijos caminan tristes por los problemas y por las carencias.
- Alegría por tener que valorar bien lo que tenemos y no suspirar continuamente por los bienes ajenos.
- Alegría por saber que, a pesar de todo, el amor de Dios reina en muchos corazones, aunque a veces, sean unas islas en un mar de odios.
- Alegría, sobre todo, entre los que nos llamamos cristianos -¡ojalá lo fuésemos!- por que tú sabes bien ese dicho de que “un santo triste, es un triste santo”.
- Alegría porque la explosión de felicidad entre los pastores de Belén fue un síntoma de que las cosas cambiarían. Y, a pesar de los pesares, han cambiado desde que tu Hijo Jesús llego a la tierra, pero no suficientemente.
Dame «Alegría», Señora, y no te pediré nada más. En serio.
Ángel Gómez Escorial